El Ayuntamiento de Estepona decretó ayer la clausura de las dos explotaciones de áridos que trabajan en la ribera del río Guadalmansa sin contar con licencia urbanística y de actividad comercial. Su cierre se ordenó en octubre del año pasado y el precinto de las instalaciones se hará efectivo en breve, cuando la Policía Local la notifique a los responsables de las sociedades.
El concejal de Urbanismo, explicó que una de las empresas realiza extracciones desde hace décadas en esta zona del municipio, bajo la autorización de la Cuenca Mediterránea Andaluza (CMA); si bien, carece de permisos para su depósito. La mercantil tampoco cumple con la obligación de rellenar las extracciones realizadas con tierra vegetal.
Los trabajos que realizan estas canteras se efectúan sobre un suelo protegido en el Plan de Ordenación del Territorio (POT). El responsable de Urbanismo ya remitió una carta a la Delegación Provincial de Medio Ambiente de la Junta y a la CMA para informarles del cierre de las instalaciones.
Los vecinos de la zona también alertaron hace una semana que las empresas responsables de las canteras continuaban realizando acopio de materiales en la zona.